Una paciente de aproximadamente 74 años con artrosis severa en la cadera izquierda experimentó una transformación significativa después de someterse a una intervención quirúrgica. Previamente muy limitada en su movilidad, dependiendo de una silla de ruedas y ayuda externa para caminar, ha logrado una recuperación impresionante en los dos meses posteriores a la cirugía. Ahora, sin signos de cojera, se ha adaptado de manera muy favorable a su nueva prótesis, expresando gran satisfacción con su mejora clínica y funcional.
